16 de octubre: Día Mundial de la Alimentación
Mensaje enviado por Pepe Postigo, representante de ONGAWA en la campaña Derecho a la Alimentación. Urgente
Hoy, como todos los años cada 16 de octubre desde 1979 y aunque no aparezca en los medios de comunicación, es el Día Mundial de la Alimentación. A pesar de que millones de personas conviven todos los días con el hambre y la pobreza, al menos este día está marcado en el calendario para dar a conocer los problemas que hay detrás de estas indignantes e inaceptables lacras.
Según el último informe sobre inseguridad alimentaria en el mundo (2012), realizado por la agencia de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), alrededor de 870 millones de personas están aquejadas de subnutrición crónica, es decir, pasan hambre: su ingestión alimentaria regular no llega a cubrir sus necesidades energéticas mínimas, con consecuencias difícilmente reversibles tanto en la infancia como en las personas que llegan a la edad adulta. Cada día, millones de personas en el mundo ingieren tan sólo la cantidad mínima de nutrientes para mantenerse con vida. Cada noche, cuando se acuestan, no tienen la certeza de si tendrán comidad suficiente al día siguiente.
La cifra publicada por FAO de personas que pasan hambre ha fluctuado en los últimos 10 años alrededor de los 800 millones de personas, llegando a más de 1000 millones en 2009-2010. En la declaración de objetivos de desarrollo del milenio, en el año 2000, se marcó como primer objetivo la erradicación de la pobreza extrema y el hambre en 2015, aunque se marcó como uno de los indicadores de cumplimiento la reducción a la mitad (que no la erradicación en sentido extricto), el número de personas que pasan hambre. Esto significaría que para 2015 «sólo» habría unos 350 millones de personas en el planeta que pasasen hambre. A dos años vista, se antoja difícil este cumplimiento.
Hoy, desde la campaña: Derecho a la alimentación. Urgente, promovida por las organizaciones Prosalus, ONGAWA, Cáritas, Ayuda en Acción y Acción contra el Hambre (http://www.derechoalimentacion.org), llamamos la atención sobre la necesidad de actuar sobre las causas estructurales que producen el hambre en el mundo: desregulación de los mercados financieros que permiten la especulación con materias primas alimentarias, timidez de las medidas frente al cambio climático, falta de control sobre las grandes operaciones de acaparamiento de tierras, etc., pero sobre todo, pedimos a nuestros gobiernos una verdadera voluntad política, muy lánguida hasta el momento, para realmente poner en marcha estrategias efectivas para erradicar el hambre en el mundo.
Así mismo, invitamos a cualquier ciudadano a que se informe sobre el hambre y la pobreza, reflexiones sobre sus causas y efectos y actúe en la medida de sus posibilidades para su erradicación. En este sentido, la Campaña acaba de editar un folleto titulado «Hambre de Justicia. Siete compromisos capitales en la lucha contra el hambre» que os adjunto, que puede servir de guía para que cualquier persona colabore en su día a día con la lucha contra el hambre.
«(…) Comer solos es muy amargo
pero no comer es profundo,
es hueco, es verde, tiene espinas
como una cadena de anzuelos
que cae desde el corazón
y que te clava por adentro.
Tener hambre es como tenazas,
es como muerden los cangrejos,
quema, quema y no tiene fuego:
el hambre es un incendio frio (…)»
El almuerzo desnudo. Pablo Neruda.