
Por una financiación climática justa
¿De dónde salen (o debieran salir) los fondos para reducir la magnitud del cambio climático y para hacer frente a sus impactos negativos?
Sabemos que el cambio climático hace tiempo que es una emergencia global. Y también es ampliamente conocido que las responsabilidades no están igualmente distribuidas en el mundo: no han contribuido a la emergencia climática de igual forma Mozambique y España, por lo que la actuación para mitigar las emisiones, promover la adaptación y reparar los daños no puede ser la misma.
El reto es global y las responsabilidades, compartidas pero claramente diferenciadas. El clima es un bien común, y debemos responder, también económicamente, de forma justa.
Presentamos un informe en el que hablamos de la justicia del reparto de las cargas: de cómo se reparten (o debieran repartirse) a nivel mundial los fondos climáticos.
¿Cómo cuantificar los daños?, ¿qué valor debe tener el coste social del carbono?, ¿cuál es la deuda climática de los países? Abordamos estas y otras preguntas y reflexionamos sobre una financiación climática justa.